Las elecciones movieron el tablero político para este 2023. Por un lado, están los pésimos resultados alcanzados por el Gobierno, y por el otro, el saldo positivo que obtuvo la Revolución Ciudadana. El nivel de incertidumbre política y la falta de gobernanza se han incrementado.

En lo seccional, el correísmo se llevó las cuatro prefecturas más grandes del país: Guayas, Pichincha, Azuay y Manabí, mientras que también alcanzó las alcaldías de ciudades importantes como Quito, Guayaquil, Machala, Santo Domingo y Esmeraldas. La segunda fuerza política es Pachakutik, quien consolidó su presencia política en la Sierra Centro, ganando en Tungurahua, Cotopaxi y Bolívar. 

El caso de Guayaquil y de Guayas marcan un hito político histórico, pues rompen con la hegemonía socialcristiana de más de 30 años. De momento, el oficialismo queda fuera del mapa político.

Además, un referendo que buscaba darle un respiro de gobernabilidad a la actual administración, tuvo el efecto contrario y redujo aún más su capital político. Con el triunfo del ‘No’, la ciudadanía le dejó claro al Gobierno que por más populares que sean las preguntas, aún se necesita mucho más trabajo estructural político, económico, ambiental, institucional y en la seguridad. 

El ministro de Gobierno, Francisco Jiménez, considera que este resultado no representa un revés político, pues pese a que no ganó, la opción ‘Sí’ tuvo una importante votación. Jiménez define al Ecuador como un país dividido entre distintas visiones políticas de cómo hacer las cosas.

Sin embargo, y según el diario Primicias, el tropiezo del Ejecutivo no solo radica en el triunfo del ‘No’ a nivel nacional, sino que los votos ‘Blancos’ y ‘Nulos’ alcanzaron un récord, sumando en conjunto 2,3 millones. No se ha visto una situación parecida desde el 2006. 

En la elección del nuevo Consejo de Participación Ciudadana (CPCCS) ganó el ‘Nulo’. De los electos, Johanna Verdezoto fue quien más apoyo obtuvo, alcanzando un 19,5% del total de la votación. A ella le siguen los ‘Blancos’ con un 19,3%. 

Esta es la segunda ocasión en la que se vota por estos consejeros, que antes eran designados mediante un concurso. ¿Cuál es la configuración política del nuevo Consejo? El correísmo tendría tres plazas, el socialcristianismo alcanzaría dos, mientras que los dos miembros restantes serían independientes. 

Entonces, y luego del breve análisis de los resultados ¿cómo estaría configurado el tablero político?

1. Se muestra un claro rechazo hacia el gobierno de Guillermo Lasso y su manera de hacer política.
2. La Revolución Ciudadana (correísmo) se ha fortalecido.
3. La provincia de Guayas y la ciudad de Guayaquil vivieron un remesón político y tendrán un cambio de liderazgos.
4. El brazo político de la Conaie es la segunda fuerza política.
5. La actual administración vio mermado su poco capital político, haciéndole más complejo negociar espacios de poder y de decisión.
6. Las nuevas fuerzas políticas de seguro querrán aprovechar el cambio interno de autoridades que tendrá la Asamblea Nacional en mayo de este año.
7. El CPCCS no goza de la suficiente legitimidad ciudadana.
8. Se está fomentando un cambio de modelo, donde los gobiernos seccionales tomarán un mayor protagonismo.
9. Las tendencias progresistas deben ser tomadas en cuenta dentro del nuevo proyecto nacional.
10. Es aún prematuro para hablar de la vuelta del correísmo más duro, aún hay que averiguar si el voto que alcanzaron fue por apoyo o por rechazo al actual régimen.

Finalmente, para un Gobierno que debe enfrentar casos de corrupción, que tiene roces políticos con el Legislativo, que ha sido incapaz de gobernar y establecer una agenda política clara, y que está a las puertas de una nueva movilización nacional, es difícil terminar un periodo y pensar, posiblemente, en una reelección.